Entrevistas post ascenso frente a Alem

En San Miguel continúan los festejos por haber subido a la cuarta categoría del fútbol argentino. El camino que tuvo que recorrer el Verde fue largo y complicado, y por eso ahora nadie se guarda nada a la hora de celebrar el retorno a la Primera C o Metropolitano B, según el nuevo nombre que le otorgará la AFA. El arquero Néstor Acosta, el delantero Braian Chávez y el técnico Patricio Hernández dialogaron con este medio una vez finalizado el partido que se definió por penales, ante Leandro N. Alem.

Los jugadores festejando en la Municipalidad de San Miguel (Fuente: TruenoVerde).

El portero, que no había atajado todos los partidos del torneo y se disputó el puesto con Ricardo Grieger, expresó: "Mis compañeros me dieron mucha fuerza en la definición por penales, en especial Ricky Grieger. Me dijeron que había mucha gente esperando el ascenso y que ataje con el corazón". Y demostró orgullo por el logro obtenido: "El grupo se propuso ascender de cualquier manera. Por suerte fue jugando bien al fútbol". "Este momento es inolvidable. El puesto de arquero es muy ingrato pero en los penales uno se tiene que lucir. Por suerte atajé esos penales, en especial el quinto en la definición. Estaba muy confiado que podía hacerlo", aseguró el guardameta, que fue fundamental para el festejo del Trueno.

Manos mágicas. Acosta detuvo dos penales que quedarán en la historia (Fuente: TruenoVerde).

Por su parte, Chávez, uno de los goleadores del equipo, manifestó que subir a la Primera C era una cuenta pendiente de él en cuanto a lo personal. "Me quedé para ascender y gracias a Dios se nos dio. Me debía el ascenso con este club, con mis compañeros y el cuerpo técnico. El grupo es excelente", afirmó el delantero. Aunque El Tanque no estuvo fino desde los doce pasos y pese a haber logrado el objetivo, igualmente se lamentó: "No puedo creer lo mal que ejecuté el penal. Me quería matar en ese momento. Sufrí mucho pero por suerte todo terminó de la mejor manera. Hay que festejar y disfrutar mucho". 

El goleador Chávez fue fundamental para conquistar el ascenso de categoría.

La próxima temporada no será fácil para San Miguel. El Verde jugará en la Primera C en el 2015 y las exigencias serán mayores. Y Chávez, hasta el momento, no tiene definido si continuará en el equipo: "No sé que voy a hacer en el futuro. Ahora pienso en disfrutar de este momento. Estoy muy feliz", cerró.

Cuestionado. Hernández logró lo que muchos no pudieron.

Y otro personaje de gran relevancia en este suceso acontecido es Hernández, quien fue cuestionado hasta el último instante. Pese a eso el entrenador cumplió con su lema "silencio y trabajo" y al final dio sus frutos. Con respecto al logro obtenido dijo: "El que sigue las categorías de ascenso nos reconocía, desde el campeonato pasado, que San Miguel jugaba bien al fútbol y era muy superior al resto". 

El técnico, orgulloso con sus dirigidos, no paró de elogiarlos; incluso, en el primer partido de la serie, que fue derrota por 2-0: "El otro día, en la cancha de Fénix contra Alem, jugamos el mejor partido pero no ligamos. El ascenso fue muy justo por los 90 minutos de la semana y por este partido. Podríamos haber convertido cuatro o cinco goles más y ellos no llegaron a crear situaciones de peligro. Pero fue un digno rival".
El entrenador insistió con los halagos a su plantel: "La formación que tenían mis jugadores era mucho más que la de los rivales; todos mis jugadores quedaron libres en cuarta y quinta de Boca, River y Vélez. Fue una segunda oportunidad para ellos".

"Fuimos los que primero empezamos a trabajar en la categoría y seguiremos laburando en los próximos días. Sólo cambiamos cuatro jugadores para esta campaña y dio resultado", continuó el DT, que agregó que "si ganábamos, empatábamos o perdíamos no pasaba nada. Eso les dije a los jugadores en la ida".

Los festejos en el vestuario luego de la consagración junto al intendente Joaquín de la Torre.

De cara al futuro, Hernández aseguró: "Con este proyecto en conjunto con la gente de San Miguel vamos a seguir soñando. Aporté mi granito de arena para una comunidad que estaba muy triste, luego de haber descendido a la Primera D". Para cerrar, concluyó: "Se dijeron muchas cosas en estos 14 meses de trabajos. Yo sabía lo que este plantel podía dar. Hace 17 años que San Miguel no ganaba nada. Esto es hermoso".